Rahvin

Rahvin
Información cronológica
Primera aparición	EDR 4
Última aparición	CEL 55
Última mención	TDM 57
Información biográfica
Nombre completo	Ared Mosinel Rahvin
Alias	Gaebril
Nacimiento	Era de Leyenda
Muerte	999 NE
Información política
Título	Lord (III - V) Rey de Andor (V)
Rango	Elegido Rey (V)
Afiliación	La Sombra
Ocupación	Líder de facto de Andor (III - V) Rey de Andor (V)
Descripción física
Género	Hombre
Complexión	Corpulento
Estatura	Muy alto
Pelo	Negro. Canoso en las sienes
Ojos	Muy oscuros

“Él prefiere atacar por la espalda, o a tus flancos.”
   —Lews Therin Telamon, refiriéndose a Rahvin

Rahvin es uno de los trece Renegados que fueron atrapados en Shayol Ghul, a finales de la Guerra de la Sombra. Antes de abandonar la Luz fue conocido con el nombre de Ared Mosinel, uno de los hombres más atractivos de la Era de Leyenda, y también de los más sensibles a los encantos de las mujeres.

Apariencia

Para hacerse una idea de lo apuesto que es Rahvin, se dice que él es tan atractivo como Lanfear es hermosa, lo que explica a la perfección la fascinación y el embeleso que despierta en todas las mujeres que le contemplan. Rahvin es muy consciente de ello y no tolera ningún tipo de rechazo; por el contrario, cuando escoge a sus amantes lo hace sin que ellas tengan alternativa alguna más que rendirse a sus encantos. El Renegado es muy alto, más incluso que Rand al'Thor, corpulento y de apariencia juvenil pese a tener siglos de edad. Tiene la piel morena y los ojos muy oscuros, prácticamente negros. Su pelo también es negro, aunque se torna blanco a la altura de las sienes.

Historia

Rahvin (por Ariel Burguess)

No se sabe nada sobre Ared Mosinel con anterioridad al Colapso, al contrario de lo que ocurre con los otros Renegados. Las primeras menciones que se tienen de él narran cómo iba escalando posiciones entre los fieles del Oscuro y su insaciable ansia de poder, que sin duda fue la causa principal por la que se pasó a la Sombra. Se cree que usaba con discreción la Compulsión para doblegar a sus posibles rivales, asegurar sus apoyos y, ante todo, mantener el control de la situación. En la Guerra de la Sombra desempeñó importantes papeles tanto al mando de las tropas como gobernando en provincias conquistadas, aunque se sentía más cómodo en el campo de la política y la diplomacia, donde siempre se movió como pez en el agua. Según se cuenta, gracias a sus arteras manipulaciones, consiguió que varias regiones se rindieran al Oscuro sin que fuera necesaria una intervención militar. Los territorios que le fueron entregados a Rahvin fueron gobernados de una forma eficaz, aunque con la misma crueldad y terror constante que desplegaron todos los Elegidos sobre sus dominios.

Fueron dos las flaquezas principales que se le pudieron achacar a Rahvin y que pudieron afectar sus capacidades como general o dirigente: su afición por las mujeres y su debilidad por la adulación. Otorgó un gran número de posiciones de poder a personas cuyo único logro fue el saber lisonjearle cuando era oportuno, si bien es cierto que era igualmente rápido en destituir a aquéllos que demostraban ser demasiado inútiles en su puesto. En donde nunca tuvo mesura fue en el trato con las mujeres; la negligencia en sus funciones se puede atribuir casi por completo al tiempo que pasaba con sus numerosas amantes. Aun así, Rahvin se encontraba en un lugar muy elevado en la jerarquía de la Sombra, entre los trece primeros Elegidos, y como tal era uno de los presentes en el cónclave en Shayol Ghul cuando Lews Therin Telamon y los Compañeros procedieron a sellar la Perforación que abría el paso a la influencia del Oscuro en el mundo. Los siguientes tres mil años Rahvin estuvo sumido en un sopor sin sueños hasta que los sellos se debilitaron lo suficiente como para que los trece Renegados volvieran a caminar por el mundo.

Sinopsis

El Dragón Renacido

Rahvin

Una vez libre, Rahvin se dirige al reino de Andor y se establece en la capital, Caemlyn, bajo el alias de Lord Gaebril. La situación en aquel país no pasa por sus mejores momentos, pues se han vivido revueltas y los Hijos de la Luz han instigado el recelo de la población por las Aes Sedai, estrechamente vinculadas al Trono del León. Según dijo Basel Gill a Mat Cauthon y Thom Merrilin, durante el invierno de 998-999 NE, nada más llegar a la ciudad, Lord Gaebril se hizo con el control y aplacó el descontento de la población. A su regreso de Tar Valon la reina Morgase se sintió tan agradecida con él que lo elevó al cargo de consejero y rápidamente lo convirtió en su favorito e inició una tórrida relación amorosa con él muy comentada por todo el pueblo. Sin duda, el atractivo de Rahvin tuvo que jugar una baza importante en la seducción de Morgase, pero ésta no se habría producido de no ser por el activo uso de la Compulsión que hizo el Renegado sobre la monarca.

Mat Cauthon viaja a Caemlyn para entregarle a Morgase una carta de su hija Elayne cuando escucha casualmente una voz que ordena a un tal Comar el asesinato de Elayne. Inmediatamente después descubre que quien desea la muerte de la Heredera al Trono no es otro que Lord Gaebril, ante cuya presencia la mismísima Morgase parece haber perdido la cabeza. Mat no es consciente de ello, pero Rahvin desea la muerte de Elayne no sólo por sus propias aspiraciones a hacerse con el control de Andor, sino también para intentar desbaratar los planes de Be'lal, quien ha tendido una trampa a Rand al'Thor en la Ciudadela de Tear y desea usar a Elayne y sus amigas como rehenes. Mat y Thom se dirigen a toda prisa hacia el sur para salvar a Elayne y las demás y, eventualmente, comunican al resto de sus compañeros lo que han escuchado y todo lo que han averiguado sobre Morgase y Gaebril. Parece obvio que Gaebril es un Amigo Siniestro, pero su verdadera identidad como uno de los Renegados no quedará demostrada hasta un tiempo más tarde.

Cielo en llamas

Los meses siguientes Lord Gaebril refuerza su posición haciéndose rodear de fieles seguidores, la mayoría de ellos Amigos Siniestros. Aprovechando la sumisión absoluta de Morgase, funda la organización militar de los Leones Blancos, que no es fiel a la Reina de Andor sino tan sólo al Trono del León. Así mismo, se las arregla para enemistar a Morgase con sus más antiguos aliados y principales apoyos, como Gareth Bryne (antiguo amante de la reina) o Ellorien Traemane, haciendo que poco a poco la reina no se quede sola sino aún peor: rodeada de viejos enemigos. Cuanto más se afianza la posición de Gaebril más crece el descontento de la población con Morgase, quien sigue ajena a lo que ocurre a su alrededor. La confianza de Gaebril es tal que se rodea de, al menos, otras siete amantes y paralelamente comienza a planificar con su reina-marioneta la conquista del vecino reino de Cairhien, en la actualidad inmerso en una desgarradora guerra civil.

Rahvin y Morgase

Rahvin es consciente de la situación en el exterior gracias a haber compelido a la fugitiva Gran Señora Alteima y a una joven Aes Sedai enviada por el Ajah Rojo. Además, mantiene contactos con Lanfear, Sammael y Graendal; por iniciativa de Lanfear, los cuatro Renegados planean acabar con Rand, empleando a Sammael como cebo para atacarle todos coligados. Rahvin accede al plan en apariencia gustoso, aunque en realidad está dispuesto a seguirlo sólo hasta que no interfiera con sus propósitos personales (por supuesto, esta misma idea la tienen los otros conspiradores). Sin embargo, cuando menos pensaba que esto podía ocurrirle, Morgase desaparece del Palacio Real sin dejar rastro. El Renegado no lo sabría entonces, pero la reina había reaccionado tras tener noticias de la rebelión en Dos Ríos y haber mantenido una seria conversación con su anciana nodriza, Lini, y descubriendo que Gaebril la había convertido en su mascota y en el hazmerreír de todo Andor. Haciendo todo lo posible por resistirse a la Compulsión, Morgase huyó de Caemlyn con Lini y otros fieles suyos y obligó así a Rahvin a adelantar su propósito de hacerse con el Trono del León.

Los rumores de que Morgase había sido asesinada por Gaebril fuerzan a Rahvin a autoproclamarse Rey de Andor antes de lo que había planeado, pero puede controlar el giro de los acontecimientos con ayuda de la represión brutal de sus Leones Blancos. Mas, cuando llega a oídos de Rand lo ocurrido en Andor, se enfurece por la muerte de la madre de Elayne y se culpa por ello. El Dragón Renacido reúne una fuerza de Aiel con la que Viaja de improviso a Caemlyn y con la que se enfrenta a Rahvin. Éste ya estaba preparado para algo así y recibe a Rand con el ataque de Engendros de la Sombra y de los Leones Blancos. Por medio de potentes descargas de rayos, Rahvin en persona asesina a varios de los acompañantes de Rand, incluyendo a Mat, Aviendha y Asmodean. Ante esto, Rand reacciona con una ira arrolladora y persigue a Rahvin a través del Tel'aran'rhiod en forma física. Los dos contendientes esquivan las descargas de fuego compacto de su enemigo, mas Rahvin lleva ventaja sobre Rand por estar más calmado y haber tenido tiempo y experiencia suficientes como para tenderle trampas por el camino.

Afortunadamente, Nynaeve al'Meara había capturado a Moghedien en el Mundo de los Sueños y se había trasladado con ella a Caemlyn, al tener noticia del peligro que corría Rand. Las dos mujeres atisban la lucha entre Rand y Rahvin y, cuando el Renegado está descuidado, Nynaeve ordena a Moghedien que le golpee por la espalda. Esta distracción es suficiente para que Rand recobre la ventaja perdida y le lance un chorro de fuego compacto que impacta de lleno sobre el Elegido y borra su existencia del Entramado. Al morir de esta forma, los últimos actos realizados por Rahvin son revertidos, y Mat, Aviendha y Asmodean vuelven a la vida sin recordar qué les ha ocurrido. La muerte mediante fuego compacto es definitiva aun para el Oscuro, quien no puede recuperar el alma de Rahvin y transmigrarla a otro cuerpo, como sí hizo con otros Renegados. Por ello, la desaparición de quien fue conocido por Lord Gaebril es definitiva, aunque mucho del mal que hizo en Andor se extendió bastante tiempo y fue el principal causante de la Cuarta Guerra de Sucesión de Andor.

Personalidad

Rahvin no es un hombre de acción, prefiere con creces la manipulación desde lejos, como se ha visto a lo largo de su actuación en el curso de los eventos. Es un experto conspirador, habituado no sólo a moverse en los entresijos del poder sino a dirigir naciones enteras aunque sea a través de reyes títere. Es astuto e inteligente y, aunque no sea tan violento como otros Renegados como Sammael, es igual de malvado y traicionero. Tiene una sed de poder difícil de superar y una ambición tan ciega como su desmedida afición por las mujeres. Se ve demasiado seguro de sí mismo y de sus habilidades, a menudo despreciando al resto de personas (por ejemplo, al no contemplar la fortaleza de voluntad de Morgase o creyéndose más fuerte que Lanfear aunque se sepa que ella es la segunda en poder de los trece Elegidos). Es un fiel siervo de la Sombra, pero lo es aún más de sus propios intereses; según Asmodean, Rahvin sería capaz de mantenerse al margen en la Última Batalla si sacara algún provecho de ello.

Poderes y habilidades

Rahvin y Morgase (por Richard Boyé)

Es muy arriesgado tratar de situar a Rahvin en una escala de fuerza en el Poder Único comparado con los otros Renegados o con cualquier otro personaje. Todos los Elegidos tienen una elevada imagen de sí mismos y menosprecian al resto, considerándolos inferiores incluso con datos que puedan demostrar lo contrario. En el caso concreto de Rahvin, es probable que su fuerza sea la media dentro de los Renegados varones. El progreso de Rand al'Thor puede ser un indicativo de este hecho: en El ascenso de la Sombra podía rivalizar con Asmodean y en La Corona de Espadas ya era tan fuerte como para medirse con Sammael, así que por pura lógica Rahvin debe encontrarse en un punto intermedio entre ambos Renegados. De una forma u otra, lo que es evidente es que Rahvin es un hombre con un poder tremendo, superado por muy pocas personas del bando de la Luz.

Como los otros Renegados, Rahvin puede moverse con total soltura por el Tel'aran'rhiod, el lugar preferente donde realizan sus reuniones secretas. Aunque es muy poderoso no suele recurrir a la fuerza bruta, pues prefiere con creces la manipulación desde una distancia prudencial. A causa de ello, aunque es muy habilidoso en la creación de tejidos ofensivos como el fuego compacto, lo es aún más con la Compulsión, una habilidad particularmente compleja. Rahvin no puede medirse con una maestra en el arte de la Compulsión como Graendal, pero aun así es uno de sus principales puntos fuertes, como se comprobó con el tremendo daño que causó en Andor. El Renegado no sólo es el varón que se sirve de la Compulsión con más frecuencia, sino seguramente también el mejor en el dominio en este tejido prohibido.