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Montañas Niebla

Montañas de la Niebla

Las Montañas de la Niebla son una escarpada cadena montañosa que existe en la zona oeste de las Tierras Occidentales.

Geografía[]

Las montañas se extienden en dirección norte-sur desde la frontera entre Arad Doman y Saldaea hasta una zona también fronteriza, en la que se encuentran los límites de Tarabon, Ghealdan y Amadicia. Actúan como una de las barreras que ha aislado durante siglos enteros la región de Dos Ríos del resto del mundo, al encontrarse en sus límites occidentales. En las Montañas de la Niebla nacen numerosos ríos que bañan la mitad oeste de las Tierras Occidentales, si bien el más importante de todos ellos por longitud, caudal y peso histórico es sin lugar a dudas el Manetherendrelle. Otros ríos cuyas fuentes se encuentran en estas montañas son el Boern, el Dhagon, el Eldar o el Tarendrelle. Otros accidentes geográficos dignos de mención que se encuentran en las Montañas de la Niebla son las Colinas de Arena o las cascadas del Velo de Eldrene. Así mismo, se tiene constancia de la existencia de seis stedding Ogier en esta zona del mundo.

Historia[]

El Desmembramiento del Mundo[]

Montañas Niebla

Montañas de la Niebla

Las pruebas apuntan a que las Montañas de la Niebla no existían durante la Era de Leyenda, sino que en aquel entonces la zona que hoy ocupan estaba cubierta por un enorme océano. Los hombres enloquecidos durante el Desmembramiento del Mundo hicieron retirarse a la enorme masa de agua (cuyos restos son el actual Océano Aricio) y elevaron a las Montañas de la Niebla, convirtiéndola en la principal cadena montañosa situada en el interior de las Tierras Occidentales. Los restos del suelo del antiguo océano aún pueden verse en las Colinas de Arena, en la vertiente oriental de las montañas.

Manetheren[]

En la época de Después del Desmembramiento, los supervivientes que se asentaron en las proximidades de las Montañas de la Niebla descubrieron la gran riqueza de éstas en metales como el oro, la plata, el hierro o el cobre, y formaron en torno a ellas el próspero reino de Manetheren, cuyo nombre en la Antigua Lengua significa "Hogar de la Montaña". Manetheren construyó su capital cerca de la fuente del río a partir de entonces llamado Manetherendrelle y durante los mil años siguientes la nación prosperó, pese a algún que otro conflicto fronterizo por el control de las Montañas de la Niebla con su vecino Safer. Manetheren fue destruida durante la Guerra de los Trollocs, y Safer le siguió unos pocos años después, por lo que durante un tiempo no hubo ninguna nación que controlase las Montañas de la Niebla.

Los Años Libres[]

En los años posteriores a la Guerra de los Trollocs surgieron nuevos reinos, y las Montañas de la Niebla se integraron dentro de sus variables fronteras sin que se pudiera distinguir a alguna nación más poderosa que sus vecinos. Se construyeron ciudades y campamentos mineros para continuar con la costumbre de explotación de los bienes allí descubiertos, mas ninguna comunidad consiguió permanecer allí durante tanto tiempo como para borrar el recuerdo de Manetheren.

La Nueva Era[]

Tras la muerte de Artur Hawkwing el reino de Andor comenzó a expandirse hacia el oeste, hasta que finalmente llegó a las estribaciones de las Montañas de la Niebla. Andor acabó adquiriendo el control de Dos Ríos y toda la vertiente oriental de las montañas, creando una amplia red de abastecimiento que comunicase con los puntos de extracción de los metales preciosos. La ciudad de Baerlon se convirtió en la principal población de Andor Occidental como punto de enlace donde los metales obtenidos por los mineros comenzaban su viaje hacia la capital, Caemlyn. Además de Andor, otras muchas naciones han reclamado sus derechos sobre las Montañas de la Niebla, si bien ninguna de ellas ha controlado el área de una forma tan completa como lo logró Manetheren. Esta aseveración puede cambiar en los próximos años, ya que el recién formado territorio independiente de Dos Ríos, declarado heredero de Manetheren, bien podría reclamar sus antiguos territorios.

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